|España - Barcelona| Las desapariciones del Parque Güell [Misión: Antonio/Arthur]

-¡Hahahaha!
Sin hacer caso al inglés con el cejo fruncido, gesto que llevaba manteniendo desde el mismo momento en el que habíamos bajado del avión que los había llevado a Barcelona, corrió hasta el pie de las escaleras blancas que llevaban a la parte superior del parque Güell, una de las maravillad turísticas de la ciudad catalana, donde las grandes columnas se mostraban espectaculares, como cada vez que había ido allí.
Las escaleras estaban abarrotadas de turistas extranjeros con cámaras de fotos que no paraban de fotografiar no un instante y mochilas exageradamente grandes colgando de su espalda, cosa muy común en aquella época estival, sobretodo en Barcelona que era la ciudad española con más zonas de interés turísticos.
-Ne, Artie, ¿No es maravillo este parque?~-preguntó con una gran sonrisa en su rostro mientras abría los brazos como si fuera a abrazar a alguien.

-Well...-repasé de nuevo con la vista el panorama del parque, lleno de turistas ruidosos sacando fotos hasta de las papeleras, las cuales debían de encontrar sumamente interesantes. Por lo menos, la entrada en sí era bastante impresionante; parecía que entrabas en un templo en lugar de a un parque.- No está mal.-dije, cruzándome de brazos.
La verdad era que echaba de menos la tranquilidad del Victoria park, en mi Londres natal. Además, allí hacía demasiada calor...y odiaba tener que ir por ahí con la camisa remangada y desarreglada.

-Pero no estamos aquí de vacaciones, así que deja de hacer niñerias y vamos a empezar a investigar, git.- añadí, empezando a subir las escaleras.

-Vamos Artie, no seas tan estirado, ¿ne~?-protestó con una sonrisa acercándose de nuevo al inglés y tomando sus dos manos con emoción contenida.-Tenemos que investigar las desapariciones nocturnas, ¿no? ¡Pues divirtámonos de día!-exclamó aferrando una de ellas y obligándole a subir rápidamente las escaleras del lugar hasta llegar bajo los pilares de color crema.
La sonrisa se le extendió por el rostro al encontrarse bajo aquel gran trabajo artístico que tantos turistas atraía y que a él tanto le gustaba. Añoraba todo lo que tuviera que ver con su país natal, y ahora que estaba allí una euforia extraodinaria hacía vibrar todas y cada una de las células de su cuerpo.

-No soy un estirado...-refunfuñé en voz baja. Simplemente tenía sentido dela responsabilidad y quería acabar cuanto antes con aquello. ¿Era eso tan malo? También estaba un poco tenso por ser nuestra primera misión...aún le temía al momento en que tuviera que luchar junto al español.

Miré de reojo a Antonio, que parecía más feliz que de costumbre al estar en su tierra natal, y en ese momento parecía un niño que acababa de entrar en una tienda de dulces. Suspiré, resignado.
-¿Y a dónde vamos, git?

-A ver...-se dijo llevando un dedo a la boca mientras inspeccionaba el alrededor. La gente se movía por la plaza como si nada ocurriera allí, haciendo fotos y hablando en idiomas extrangeros admirando algunos de los elementos turísticos de ka zona que tanto llamaban su atención. No había mejor lugar para secuestrar gente que ese lugar en el que nadie se daba cuenta si un despistado turista desaparecía.-Si la gente desaparece por aquí debería haber "secretas" inspeccionando la zona...-anunció al mismo tiempo que corría hacía al menor y le tomaba un brazo algo más animado.

-Si nos movemos mucho nos pueden acusar de ser los secuestradores y detenernos, vayamos a tomar una cerveza por aquí cerca y cuando sea de noche vayamos a investigar aprovechando la oscuridad, ¿ne?-ofreció sonriendo de oreja a oreja y tirando del menor hacía fuera del parque sin tener en cuenta su opinión primero.